4 de julio de 2021
Crisis de candidaturas en el kirchnerismo por Carlos Tórtora
La hegemonía del kirchnerismo en el escenario político no se ve acompañada por el surgimiento de dirigentes con peso electoral.
Más bien lo contrario; a poco más de dos meses de las PASO, el oficialismo sufre de anemia de candidaturas. Esto se advierte sobre todo en los dos mayores distritos, Buenos Aires y CABA. Bajo el liderazgo de Cristina Kirchner, emergieron unas cuantas figuras que hoy manejan resortes de poder, como María Fernanda Raverta (ANSES), Luana Volnovich (PAMI) y Mayra Mendoza (intendencia de Quilmes). Ninguna de ellas tiene peso propio como para encabezar las listas de diputados de Capital y Buenos Aires.
Algunos consultores del oficialismo exhiben su optimismo diciendo que no es necesario que los que encabecen las listas tengan hoy un gran conocimiento público, ya que alcanzaría con que se saquen un par de fotos con CFK para ser conocidos. Otras voces son menos eufóricas y reconocen que hay en el oficialismo una crisis de candidatos que tiene su complejidad. El problema es mayor aún por cuanto la oposición puso en carrera a figuras con peso electoral como Facundo Manes y Diego Santilli en la provincia y María Eugenia Vidal y Ricardo López Murphy en Capital.
Con gusto a poco
En este casting de candidatos, uno que fue primero un mes atrás fue Daniel Scioli, que llegó a medirse en varias encuestas para desaparecer luego de los titulares. El ex motonauta estaba entusiasmado con su retorno a las urnas pero cometió el error de comentar en rueda de amigos que, si ganaba con un buen margen la elección en provincia, se le abría la chance de ser presidenciable para el 2023. Esto, más otras cosas, habrían provocado la reacción de la vicepresidente, que vetó toda proyección de aquél.
Un candidato más del gusto K es Sergio Berni, que tiene un elevado conocimiento público y posa de rebelde dentro del gobierno. Berni cuenta con la confianza de Cristina pero se lleva bastante mal con los intendentes del conurbano y sobre todo con Alberto Fernández y su círculo íntimo. Algunos dicen que este perfil disidente es justo lo que hace falta para tener empatía con una sociedad ganada por el mal humor.
Berni les dice a sus interlocutores en el PJ bonaerense que no aceptará otro lugar que no sea el primero en la lista. En su búsqueda de soluciones, la ex presidenta recurrió días atrás al intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, que tiene escasa proyección en el electorado independiente. Aparte, Insaurralde ya encabezó la lista de diputados en el 2013, siendo derrotado por el Frente Renovador de Sergio Massa.
Las mujeres que aparecen en danza para cabeza de lista carecen de volumen político propio. Es el caso de la presidenta del Consejo Nacional de Políticas Sociales, la concejal platense Victoria Tolosa Paz. Su marido, José Albistur, pertenece al círculo íntimo del presidente pero es mal visto por la vicepresidenta, que desde hace años no lo atiende. A la expectativa y siempre para Buenos Aires, esta Malena Galmarini. En el gobierno creen que si ella fuera la primera diputada esto sería agrandarlo a su marido, Sergio Massa.
En Capital, la escasez de candidatos es aún más palpable. Frente a María Eugenia Vidal, el Secretario de Turismo Matías Lammens aparece débil e insuficiente. Su competidor en el kirchnerismo, el legislador porteño Leandro Santoro, es un producto nuevo y en experimentación. El kirchnerismo aspira a colocarse a sólo 10 puntos debajo de Juntos por el Cambio pero no parece sencilla esta empresa.
Carlos Tórtora