Una multitud con fuerte presencia kirchnerista se concentró ayer en Plaza de Mayo para respaldar al periodista Víctor Hugo Morales, quien pidió a los directivos de radio Continental que le "devuelvan" el programa del que fue despedido.

Acompañado por referentes del kirchnerismo como el exdirector de la AFSCA, Martín Sabbatella; el diputado Andrés "Cuervo" Larroque y personalidades de la política como Hebe de Bonafini y el exjuez Raúl Zaffaroni, Morales reclamó: "Devuélvanme el programa y queda todo olvidado". 

"Quisiera volver. No me veo cada mañana afuera de un lugar que he aprendido a amar profundamente", destacó, al tiempo que apuntó que volvió a cargar las tintas contra el Gobierno nacional por la situación que le toca vivir a a partir de la "presión" que ejerce a través de la pauta oficial. En ese sentido, recalcó que su intención es ser "cuidadoso" y "tender puentes" con la empresa periodística que lo echó de su programación.

"Es sincero mi pedido a radio Continental para que oigan el deseo de la gente a escuchar a determinado periodista. Ojalá lo hayan escuchado y que escuchen mi pedido. "Le pido a la empresa que deje de tener miedo", afirmó luego del acto en declaraciones periodísticas. 

"Los programas de Mitre van a seguir siendo escuchados, pero no para quienes quieran escuchar una voz distinta en Continental. Se podrá sintonizar a la noche Canal Trece pero pero quienes quieran ver 678, no lo van a poder a hacer", denunció.

Arriba del escenario, desde el que el relator deportivo y comunicador se dirigió a los presentes como único orador, estaban entre otros la exministra de Cultura Teresa Parodi, la exlegisladora porteña Gabriela Cerruti, el dirigente social Luis D´Elía, el periodista Daniel Tognetti, el exjefe de Gobierno porteño Aníbal Ibarra, la diputada nacional Nilda 
Garré, el dirigente radical alineado al kirchnerismo, Leopoldo Moreau, los panelistas del programa televisivo 678, Cynthia García, Mariana Moyano, Dante Plama y Edgardo Mocca, entre otros.

Ante miles de personas que colmaron la Plaza y desbordaron los accesos sobre Avenida de Mayo y las diagonales sur y norte, Morales se declaró "perplejo" por la convocatorio, pero avisó que la gente no estaba ahí "por un periodista en particular sino por el periodismo".

Como suele ocurrir en cada concentración convocada por sectores kirchneristas, las agrupaciones más convocantes fueron La Cámpora, el Movimiento Evita y Nuevo Encuentro, pero también flamearon banderas de Descamisados, Partido Comunista Congreso Extraordinario, Peronismo Militante, Miles y Tupac Amaru, entre otras.

En otro pasaje de su discurso, el periodista enfatizó que Clarín se dedicó todo el año a difundir "una mentira tras otra", y puso como ejemplo cuando tras el deceso del exfiscal Alberto Nisman acusaron a Cristina kirchner de "asesina" y que "inventaron que un comando venezolano-iraní se metió en el baño para matarlo".

"Fue un suicidio por donde se lo mire", lanzó, al tiempo que consideró que a partir de estas "mentiras" es que "la ley de Medios debe ser aplicada".

Aseguró que "todo el tiempo han mentido y envilecido al periodismo", y en ese marco llamó a "seguir luchando".

"Es necesario estar informados porque es nuestro mecanismo de defensa", señaló, a su vez que manifestó que "la libertad de expresión es que los periodistas puedan actuar por afuera de la línea editorial que tienen los medios".

Para Morales, la ley de medios "despertó" a la población porque habilitó la discusión" y catalogó esa normativa sancionado en 2009 como "la más maravillosa creación del corazón democrático de la Argentina".

Por otra parte, cuestionó la no renovación de los contratos por parte del gobierno nacional a miles de empleados contratados, que se quedaron sin trabajo en distintas dependencias del Estado nacional y Municipios. 

"En el Centro Cultural Kirchner no son ñoquis, son trabajadores en serio. No hay ñoquis en Arsat. Quiero pedirle al yerno de (Oscar) Aguad que restituya a esa gente. Quiero pedir por los empleados despedidos del Senado. Quiero pedir por los trabajadores apaleados en la Plata en una represión que van a querer ocultar, y por eso quieren un periodismo que no sea desobediente", concluyó