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24 de septiembre de 2020
Encontraron a una beba apuñalada dentro de una bolsa de basura: su mamá dice que no recuerda nada
La mujer está detenida en Misiones por intento de homicidio, pero su familia asegura que tuvo un brote psicótico.
Un profesor de gimnasia se sorprendió días atrás al escuchar el llanto de un bebé cuando caminaba cerca de una zona donde se descarta la basura en la provincia de Misiones. Así fue como, con espanto, descubrió dentro de una bolsa de residuos negra a una recién nacida con un cuchillo clavado en la espalda. La madre de la criatura fue detenida por intento de homicidio pero asegura que no recuerda nada.
La guardia de la División del Comando Oeste de la Policía provincial trasladó a la beba inmediatamente al Hospital de Noeonatología, donde fue intervenida quirúrgicamente para retirarle el arma blanca y, pese al grave daño pulmonar y corporal que sufrió, logró recuperarse y los médicos la apodaron “Milagros”.
En tanto, las autoridades localizaron a la mamá de la nena y la detuvieron acusada de haber querido matarla. Sin embargo, la familia de la mujer sostiene que tuvo un brote psicótico, que en el hospital no recibió ningún tipo de apoyo psicológico ni acompañamiento por su situación y que después, en la comisaría, la golpearon y la torturaron.
El primer capítulo de la dramática historia salió a la luz cuando el destino puso a Milagros en el camino de Diego Penayo mientras caminaba por la avenida Costanera Oeste de Posadas. Dos días antes, el 5 de septiembre, una mujer salía de su casa para ir al hospital porque le dolía la panza y no supieron más nada de ella hasta dos días después.
Nadie sabía que estaba embarazada, al parecer, ni ella misma. Pero cuando su familia la encontró ya había dado a luz en el Hospital Materno Neonatal, donde se había internado con el DNI de otra persona. “Todavía es incierto el nombre del médico que le dio el alta. La atendieron como 5 médicos y se pasan la pelota uno al otro de quién fue. Lo que sí se sabe es que no se le hizo ningún control, ni chequeo psicológico para determinar si estaba en condiciones psicológicas para darle el alta”, dijo a Minuto Uno el abogado de la mujer, Manuel Rondón.
La familia de la acusada se enteró de golpe de lo que había ocurrido con ella durante los dos días que estuvo desaparecida cuando la policía se presentó en su casa para llevársela detenida. Entonces, el mundo se les vino abajo y en medio de la conmoción apenas atinaron a contar a los medios locales cómo estaba cuando se reencontraron con ella.
“Estaba en un total estado de shock. Yo nunca la había visto así, temblaba, estaba fuera de sí, lloraba, sólo decía mi bebé. Se arañó toda, lloraba y se tiraba de los pelos. Intentamos frenarla, a mí y a mi cuñado también nos araño y golpeó”, sostuvo su hermana.
La hipótesis de una psicosis posparto apareció como la más probable para ellos a la hora de intentar explicar su comportamiento. Sin embargo, la detuvieron y en la comisaría 19ª, donde quedó alojada, fue golpeada brutalmente por las otras internas “con la complicidad del personal de custodia que le abrió las celdas”, afirmó el abogado. Como resultado de la paliza, el 9 de septiembre la mujer tuvo que ser operada de urgencia, le hicieron un legrado y estuvo internada e incomunicada durante 10 días.
La causa fue caratulada de homicidio agravado por el vínculo en grado de tentativa, pero la estrategia de Rondón apunta a demostrar que no se trató el caso con perspectiva de género. En este sentido, planean iniciar una denuncia contra el hospital por abandono de persona y ya denunciaron al Servicio Penitenciario ante la Comisión Provincial de Prevención de la Tortura de Misiones.
Por otra parte, también tomó intervención en favor de la imputada el Colectivo de Acción Contra la Violencia de Género. Su titular, Mariana Pizarro, expresó: “Dieron de alta a una persona que acababa de sufrir una cirugía mayor con un bebé sin que haya ninguna otra persona adulta responsable y sin ninguna evaluación que permita ver su estado mental. Una persona que acaba de ser operada no está en condiciones de encargarse de un bebé e irse sola a un hospital caminando”. “Hay una enorme violencia hacia las mujeres que están en situación de gestación, parturientas o que atraviesan el puerperio”, concluyó.