Una vaca de una granja de Australia pudo escapar al destino del matadero por su descomunal tamaño. Su dueño considera al animal como el más grande del país oceánico y valoró sus características.

El espécimen, alojado en una granja del rancho Lake Preston, mide 1,94 metros y pesa 1.400 kilos. El propietario, Geoff Pearson, destacó que facilita la localización del rebaño ya que las otras vacas la siguen por ser la más imponente.

El animal es en realidad un novillo macho e iba a ser dirigido al matadero a sus dos o tres años para comercializar la carne.

Sin embargo, Pearson explicó a The Guardian que el ejemplar era demasiado grande para los requerimientos del matadero, por lo que iba a ser muy pesado para las máquinas e iba a tocar el suelo colgando, lo que contaminaría la carne.  

La principal hipótesis que explica el descomunal tamaño se basa en que el novillo tuvo la oportunidad de crecer y pastar durante siete años, algo que no se le permite a los otros que son sacrificados.

"Podría haber otros animales que creciesen hasta este tamaño, pero se les priva de esta oportunidad”, agregó Pearson.

Pese a su inmesidad, Kinckers no es el bovino más grande del mundo. Según el Libro Guinness de récords, el buey italiano Bellino es el mayor del mundo, que supera los dos metros y pesa 2.267 kilos.