El estaba de paso por Los Toldos, entre otras cosas gestionando la renovación de su licencia de conducir. Y… al momento del debate final que hacemos en la charla de concientización que damos en el Centro Cívico todos los martes y jueves desde las 08:00 hs., él hizo este comentario. Decía que en España es visto como un tonto aquel que no cumple con la ley, pero aquí es todo lo contrario. Conducir una moto sin casco en la cabeza, un automóvil sin el cinturón de seguridad colocado, cruzar por cualquier lado, no dar prioridad a los peatones, estacionar sobre la senda peatonal es moneda corriente. Este joven ve con buenos ojos que en el Partido de General Viamonte se impartan las charlas de concientización pero por otro lado creía que va a llevar muchos años revertir la situación en nuestra sociedad. Que lamentablemente hasta que cambiemos culturalmente, nuestra mala actitud se va a llevar muchas vidas tanto en este medio como en nuestro país. A mi entender él tiene razón ya que para muchas personas el trabajo de concientización que venimos haciendo es una pérdida de tiempo. Que no sirve para nada.

Siempre observo las caras de los vecinos que van al centro cívico, escucho las murmuraciones de algunos, mientras vamos armando todo para luego comenzar con nuestra tarea, que no siempre son de conformidad. Pero al finalizar muchos de ellos cambian totalmente de actitud, ya que han tomado conciencia. Ahora, yo les hago una pregunta: -¿Cuánto creen ustedes que puede durar esta motivación? Tal vez, una hora, una semana, un mes o para toda la vida. El tiempo de duración, señores y señoras depende de cada uno de nosotros. Recuerden aquel comentario que hice en una columna sobre las dos formas de aprendizaje ya sea por medio del consejo o del golpe. El consejo es aquel que podemos recibir en toda nuestra vida de parte de quienes nos quieren, en nuestra formación escolar, profesional, en estas charlas, etc. y el golpe es aquel que puedo recibir a causa de no escuchar el consejo. Que si hablamos del tema que nos compete puede ser desde una infracción de tránsito, por lo que debo pagar la multa, o un lamentable siniestro vial que puede acarrearme consecuencias de por vida. Este joven residiendo en España, en otra realidad cultural,  se dio cuenta de la nuestra, lamentable, pero que podemos cambiar si tomamos conciencia. Hasta la próxima.     

                                                   Prof. Mario Esteban Barizoni

                                                          Subcomisario (Adm).