El viernes culmina la jornada laboral en la ciudad y muchos ciudadanos cargan los bolsos al auto para emprender una escapada a la costa. Ya no se quedan una semana o quince días en la playa, la estadía es hasta el domingo a la noche. Dos días intensos, pero sólo dos.
“Viajar quince días es muy costoso: alquiler, comida, videojuegos para los nenes, un helado en la playa, todo suma y los números no dan. Preferimos guardar las vacaciones para otro momento y aprovechar algún fin de semana en esta época”, expresan los turistas
Los números oficiales informan que los balnearios van a estar abarrotados de gente, pero los mismos turistas y comerciantes reconocen que en las playas hay menos movimiento que en el verano del 2013. El verano “explota” únicamente los fines de semana.
“Tenemos en alquiler un departamento en San Bernardo a 4500 pesos la primera quincena de enero, pero solo llaman para fines de semana. Todavía no pudimos alquilarlo ni un día”, sostiene Betty Tundidor a este portal. “A esta altura del año pasado estaba todo ocupado”, agrega.
La cantidad de gente que disfruta del mar durante el día y pasea en el centro durante la noche, aumenta considerablemente los sábados y domingos. En esta primera semana de enero se han observado escenas que no coinciden con el verano anterior: Mar del Plata, despoblada.