Miles de argentinos comenzaron a cruzar hacia Chile aprovechando el fin de semana largo y el denominado Black Friday, que se suma al furor por las compras en el país trasandino de artículos a bajos precios.

Se espera, para los tres días, la llegada de 30.000 compatriotas, según datos fronterizos chilenos.

En las primeras horas de ayer, cerca de 3 mil argentinos ya habían pasado por los diversos puestos fronterizos que hay con Chile y se espera otros tantos para estos días que conforman el feriado del Día de la Soberanía en nuestro país.

Además, se suma el Black Friday chileno para comprar. El combo es ideal ya que los precios bajos se combinan con el famoso día de descuentos que surgió en los Estados Unidos y el país trasandino adoptó con fuertes promociones.

El trayecto de Buenos Aires a Santiago de Chile se realiza en dos horas en avión, y los cruces terrestres generan un gran impacto visual durante los fines de semana largo.

Cabe destacar, que el Paso de los Libertadores -que conecta la provincia de Mendoza con Chile- ya vio pasar 15.000 argentinos en plan de compras por el feriado del 12 de octubre. Según Migraciones, se formó con una cola de 15 kilómetros de autos.

Con el Black Friday, los descuentos podrían llegar al 50% -según fuentes del sector comercial chileno- por lo que compatriotas de diversos puntos de nuestro país ya posaron su mirada sobre los principales centros comerciales de la ciudad de Santiago de Chile.

En lo que va de 2016, las autoridades del país vecino ya señalan un crecimiento del 52% de argentinos que cruzan el paso fronterizo, calculándose un total de 1,5 millón de personas. La locura por las compras no se detiene: a tal punto que las agencias de viajes ofrecen vuelos, estadía y tours para aquellos que estén dispuestos a viajar y aprovechar el tiempo al máximo.

Bonificaciones

En tanto, algunas casas adelantaron bonificaciones en tecnología, uno de los rubros más demandados. Por ejemplo, un celular de una marca reconocida con 32 GB de memoria suele tener una diferencia de 40% con Argentina. Ahora, el mismo teléfono costará en Chile menos de la mitad.

Esta misma relación se aplica a productos como televisores inteligentes, que en Argentina cuestan casi el triple, o a electrodomésticos: una cafetera vale en Chile una cuarta parte que en nuestro país.