Un evento climático de lo más curioso se da en algunos sectores de los Estados Unidos. Más específicamente las zonas del “Midwest” (Medio Oeste) y las planicies están padeciendo el paso de los “derechos”. Estos son cúmulos de tormentas eléctricas que pueden abarcar cientos de kilómetros cuadrados y varios estados a la vez.

Los estados de Iowa, Nebraska, Minnesota, Illinois y Dakota del Sur fueron los más afectados. En algunos sectores el cielo se tiñó de un impresionante color verde. En algunos lugares este fenómeno generó vientos de hasta 99 millas (160 kilómetros) por hora. Además, algunos vecinos reportaron la caída de granizo que alcanzaba el tamaño de pelotas de tenis.

La furiosa tormenta causó daños estructurales en varias regiones del país. Postes de luz y árboles fueron derribados por los brutales vientos. Decenas de miles de hogares sufrieron cortes debido a la caída de cables y otra infraestructura necesaria para el suministro eléctrico.

Mientras este “derecho” golpeaba la región, los damnificados pudieron ser testigos de un cielo color verde radioactivo, casi fosforescente. Si bien esto puede ocurrir durante tormentas eléctricas, no se tenía registro de un color tan intenso en el cielo.

Para que un cúmulo tormentoso sea clasificado como “derecho”, este debe causar daños en una distancia de 650 kilómetros con una profundidad de 100 o más. Esto genera un área de devastación enorme que afecta la vida de cientos de miles de personas en toda la zona central de los Estados Unidos.

Este fue el primer “derecho” de muchos habitantes de la zona, que no dudaron en publicar fotos y videos en las redes sociales documentando lo sucedido.

Según expertos meteorólogos, el color del cielo se debe a las ondas de luz que son alteradas por las densas nubes, que dejan pasar a la superficie de la tierra solo las tonalidades azules. Sumado a los colores amarillentos del atardecer, se forma esta impresionante gama de verdes en el cielo.