Durante el mes de enero de este año varias escuelas rurales de nuestro distrito, fueron objeto de diversos robos y daños. Estamos hablando de escuelas alejadas, que se encuentran solas en medio del campo y desprotegidas. Enteradas de dicha situación y ante la gravedad de los hechos, desde el Consejo Escolar inmediatamente solicitamos una reunión con el Secretario de Seguridad, el Jefe de la Comisaría Local y el Jefe de la Patrulla Rural, concretándose la misma el día 29 de enero. En esa reunión todos coincidimos en la urgencia por tratar de revertir esta situación, para evitar que se produzcan nuevos hechos, para ello y debido a la falta de móviles (así nos dijo el Jefe de la Patrulla) y a las distancias reales en la zona rural, concluimos que una buena medida sería la colocación de alarmas a ser controladas desde la Central de Monitoreo con que cuenta la Municipalidad local. Luego de esta propuesta nos reunimos con el Sr Intendente para solicitarle el uso del dinero proveniente del Fondo Educativo para solventar dicho gasto. El Sr Intendente estuvo totalmente de acuerdo con nuestro pedido, aprobándolo inmediatamente y luego de consultar a los contadores nos comunicó que la parte administrativa sería delegada a la Subsecretaria de Educación en ese momento, Directora de Educación actual, Dra. Cintia Leguizamón. En días posteriores, acompañamos a los responsables de la colocación de la alarmas a recorrer las Escuelas para comprobar el estado de las mismas y realizar el presupuesto para entregarlo prontamente. En las 48 horas posteriores dicho presupuesto fue entregado a la Dra. Leguizamón, estábamos aquí a mediados del mes de FEFRERO. Esperábamos que esta situación se solucionara en poco tiempo, debido a que no había ningún obstáculo para lograrlo, estaba la gestión, estaban los fondos, estaba la decisión política, nos quedaba la compra. Pero no fue así, comenzaron algunos inconvenientes que no permitían colocar las alarmas, el tiempo fue pasando y en el mes de abril, ocurrió lo que NO tenía que ocurrir, volvieron a robar en la Escuela N° 26, lamentablemente. Indignadas solicitamos explicaciones al Secretario de Seguridad, quien nos dijo que él estaba esperando nada más que le dieran las alarmas y colocarlas. Pedimos explicaciones a la Directora de Educación, la misma se excusó diciendo que aún no encontraba la forma legal de comprar las alarmas, pero mientras tanto otra Escuela había sido robada y dañada por segunda vez. Ahora nos permitimos reflexionar… Ante estos hechos, con una gran cuota de impotencia y dolor nos preguntamos ¿porqué si el Sr Intendente hablando con sus contadores nos dio la aprobación para la colocación de alarmas, cuando este tema llegó a manos de la Sra Cintia Leguizamón se complicó tanto? Solicitamos una entrevista con dicha funcionaria hace dos semanas y la misma nos contestó que no nos podía atender porque estaba ocupada organizando el Acto de la Revolución de Mayo. Entonces y debido a lo antes relatado, nos preguntamos si las Escuelas Rurales y su seguridad no ocupan un lugar primordial en su agenda de trabajo, siendo que la mayoría de los elementos robados fueron los que esta misma funcionaria comprara con el Fondo Educativo, ocasionando así un doble gasto. Nos preguntamos también si sabrá dicha Directora lo que significa para un docente, que diariamente recorre varios kilómetros con lluvia, frío, calor, caminos intransitables llenos de barro o arena, llegar a su Escuelita y encontrar la puerta forzada, los vidrios rotos, los elementos desparramados en el piso? Qué triste para nosotros como DOCENTES tener que solicitar la publicación de esta nota habiendo tenido la oportunidad de solucionarlo políticamente. LA BUROCRACIA ROBÓ NUEVAMENTE LAS ESCUELAS!!!