En Río Negro, una mujer a punto de jubilarse descubrió que su nacimiento nunca había sido inscripta en el Registro Civil, y que, a pesar de contar con un número de documento de identidad, el mismo correspondía a otra persona con distinto nombre y apellido, que había nacido poco antes que ella en un lugar cercano.

El curioso caso fue descubierto cuando ANSES le denegó la jubilación debido a que otra persona, que contaba con ese número de documento, ya percibía el beneficio. Para poder resolver su situación, tuvo que dar intervención a la justicia, y ahora deberá esperar la resolución a cargo de Moira Revsin, jueza de familia de General Roca.

En la investigación del caso se pudo concluir que la mujer, de la que no trascendió la identidad, "siempre creyó propio era de aquella otra señora y que su nacimiento, ocurrido en el otoño de 1959, jamás había sido inscripto".

Ahora, el registro de su nacimiento "no podrá ser completa, porque no existen registros oficiales de ningún tipo que permitan acreditar la identidad de su padre ni de su madre, por lo que el campo referido a la filiación en su partida de nacimiento quedará, al menos por ahora, vacío", según lo determinó la investigación.

En ese sentido, la única referencia que hay de los padres es la del acta de nacimiento de la hermana, donde figura solamente el nombre del padre. Cabe recordar que en aquella época era común que uno sólo de los progenitores inscriba al bebé y que solamente quedaba registrado su nombre; por lo que desde la justicia concluyeron que esto sería lo ocurrido en este caso.

"Todas estas personas vivían en zonas rurales muy alejadas de centros poblados, en donde no podían tener acceso a oficinas de la administración pública para la realización de trámites, dentro de ellos las inscripciones de nacimientos de sus hijos e hijas", precisaron desde la justicia, que señalaron que tendrán en cuenta este contexto para poder dar respuesta al caso