Después de sus vacaciones por Europa, Santiago Maratea regresó esta mañana al país y se encuentra realizando el aislamiento correspondiente tras viajar al exterior. “Me re asusté con lo de Maru Botana, que como no fue a un hotel le metieron una multa de 4 millones de pesos. ¿Sabés la colecta que te hago para pagar mi multa? Pero averigüé y cómo soy de Ciudad, no tenía que ir a un hotel”, contó en un video de Instagram. Y en medio de ese relato, un llamado internacional lo descolocó completamente.

“Tengo una noticia. Se van a caer de ort... con esto que les voy a contar. Me suena el teléfono, con un código +34, eso es de España. Atiendo. ‘Hola, Santiago Maratea te estamos llamando de la policía metropolitana española de Cataluña. Encontramos una cartera tuya’. ¡Encontraron mi cartera!”, exclamó.

Maratea agradeció cómo la policía española hizo todo lo que estaba a su alcance para avisarle que habían encontrado sus pertenencias. “La cartera tenía una medallita del gimnasio al que estaba yendo en Barcelona. Se contactaron con el gimnasio, preguntaron por mí y les dieron mi contacto para llamarme y darme la cartera. Les pasan el contacto y me llaman”, señaló.

“Me dijeron ‘tenemos tu cartera, tiene dos tarjetas de crédito, unas llaves, 20 euros, un dólar americano y 50 pesos argentinos’. Me dicen que puedo retirarla en 48 horas o mandar una autorización por mail para que la retire otra persona”, agregó. Feliz por la noticia, el instagramer aseguró que sentía como si hubieran encontrado al perro que perdió a los 6 años. “No queda otra que aplaudir con el ort...”, apuntó.

Por otra parte, Santi expuso por qué rechazó sumarse a la tercera temporada de MasterChef Celebrity (Telefe). “Me tentó un montón porque es el único programa de la tele al que le va muy bien, bueno aparte de La Voz Argentina”, reconoció. Sin embargo, llegó a la conclusión de que sería mucho más útil para sus colectas si seguía priorizando su actividad en las redes sociales.

“Flashié que como era un programa de comida podía hacer una colecta para construir comedores y que sean orgánicos”, sostuvo. Pero el proyecto le parecía muy grande como para llevarlo adelante dentro de un formato ya existente. “No era el momento, estoy enamorado de lo que hago”, concluyó.