El presidente Alberto Fernández anunció el viernes que durante la nueva etapa de la cuarentena, que comienza el lunes, estará permitido realizar reuniones de hasta 10 personas al aire libre en todo el país. Sin embargo, esta actividad no se habilitaría en el territorio bonaerense, debido a ciertas dudas que tiene el gobernador Axel Kicillof, que esperaría a que baje el número de infectados para otorgar luz verde a la iniciativa.

“La postura de Axel Kicillof es no abrir nada, pese a las presiones de varios intendentes”, aseguró Marcelo Bonelli en TN. “El hecho de que la ciudad abra actividades, le genera un sinsabor a la Provincia”, agregó.

La incertidumbre en torno al futuro del aislamiento en la Provincia se generó no solo por el anuncio del presidente, sino después de que el jefe de Gobierno de la Ciudad Horacio Rodríguez Larreta comunicara que abrirán bares al aire libre.

Según indicó el periodista, desde el entorno del gobernador, que todavía no realizó declaraciones sobre el tema, no están de acuerdo con la idea de sumar flexibilizaciones por el momento. Es que, la principal preocupación es que la cantidad de contagios diarios no bajan.

Alberto Fernández en su discurso del viernes indicó que la medida que permite los encuentros de hasta 10 personas sería “implementada en cada jurisdicción”. Por lo tanto, le permite a Kicillof optar por no autorizar esas salidas.

“Este tipo de mensajes son confusos, porque hay una especulación política frente al agotamiento social”, comentó Bonelli.

De todas formas, se espera que el lunes, en el habitual informe que presentan los ministros de Salud, Daniel Gollan, y el jefe de Gabinete, Carlos Bianco, se aclaren los detalles sobre la continuidad de la cuarentena.

En cuanto al contexto epidemiológico de la Provincia, si bien reconocen que hay un amesetamiento de los contagios en los partidos del AMBA, los números siguen siendo altos. Esta semana se dieron dos jornadas consecutivas con más de 6200 nuevos casos.

Además, la situación en algunos de los 100 partidos del interior bonaerense se complejizó. Se cuenta, por ejemplo, el caso de Mar del Plata, que decidió el viernes volver a la “fase 3” tras un repunte en la curva de positivos en COVID-19.

En este sentido, el distrito seguirá con las mismas restricciones, pese a la presión de algunos jefes comunales y empresarios para que retornen la construcción privada, los locales gastronómicos con atención al aire libre y los gimnasios, entre otras actividades.