Imagina que pudieras saber no solo el tiempo que va a hacer mañana en un barrio de tu ciudad o en tu población, sino que también pudieras leer el pronóstico de cómo va a estar de contaminada dicha zona. Quizás este dato no te interese mucho, pero seguro que sí que te gustaría saberlo si tienes alguna enfermedad respiratoria, alergia, etc.

Hasta la fecha conocer estos datos con antelación, por lo general, no era posible. Las mediciones de los niveles de polución se hacen en tiempo real o a toro pasado. Sin embargo, han creado una tecnología que puede adelantarse y vaticinar cómo estará de contaminado el aire de una determinada área.

El proyecto está siendo conducido por un equipo de científicos informáticos de la Universidad de Loughborough (en Reino Unido). Han creado una inteligencia artificial que es capaz de predecir los niveles de polución con horas de anticipación o incluso días (1 o 2).  Lo hace sirviéndose de datos históricos públicos de cada lugar y, en base a ellos, realizando pronósticos.

La IA calcula las PM2.5, partículas de menos de 2,5 micras de diámetro que se caracterizan por esa típica visibilidad reducida en las ciudades y un aire nebuloso cuando sus niveles están disparados. Este contaminante es uno de los que más preocupan a la salud pública, debido a que las partículas son tan minúsculas que pueden llegar fácilmente a los pulmones de las personas y, posteriormente, al torrente sanguíneo y producir problemas respiratorios, cardiovasculares o cerebrovasculares.

Hasta ahora sí que se habían creado algunos sistemas que podrían predecir los PM2.5, pero esta tecnología supone varios avances. Una de las novedades del sistema reside en que puede aportar una nueva visión de los factores ambientales que tiene un impacto significativo en los niveles de contaminación del aire. Así, interpreta distintos factores y datos para sacar cifras. Y no solo da una cantidad, sino que ofrece un rango de valores realizando lo que se conoce como ‘análisis de incertidumbre’.

Primeras pruebas realizadas en China

El sistema es parte de un proyecto de investigación más amplio que habría sido financiado por el Fondo Newton, que tiene cuatro socios: Satoshi Systems Ltd, la Universidad de Loughborough, los Institutos de Tecnología Avanzada de Shenzhen y la EEG Smart Intelligente Technology en China.

Los investigadores usaron en un primer momento su sistema en China con el fin de probar y entrenar a sus algoritmos. La elección tenía un motivo: 145 de las 165 ciudades del país suelen contar con serios problemas de contaminación del aire.

El profesor Qinggang Meng, uno de los dos investigadores que está liderando la creación de la IA ha comentado que: “la contaminación del aire es un desafío acumulado a largo plazo que enfrenta todo el mundo y, especialmente, incide en muchos países en desarrollo”.

“El proyecto tiene como objetivo medir y pronosticar la calidad del aire y los niveles de contaminación. También exploramos la viabilidad de vincular la información en tiempo real sobre las emisiones de carbono con el comercio de crédito de carbono de extremo a extremo, dedicándonos así al control del carbono y a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero”, ha añadido.

El investigador espera que esta investigación ayude a “conseguir un aire más limpio para la comunidad y mejorar la salud de la gente en el futuro”.