El avión privado salió con tres personas a bordo del aeródromo de la ciudad bonaerense de San Fernando el lunes a la tarde y desapareció de los radares cinco minutos después del despegue.

"Estamos hablando de un avión que, pese a estar habilitado para volar, no funcionaba su transponder, no hizo un pedido de emergencia, dejó de comunicarse y, si se hubiera caído, tampoco funcionó la baliza que emite su ubicación desde el lugar del impacto. Hay dos opciones: o se fue del país o fallaron demasiados controles antes de que despegara”, dijo José Indaco, piloto comercial con más de 2.500 horas de vuelo y casi 30 años de experiencia.

La aeronave es intensamente buscada por Prefectura, Gendarmería y la Administración Naval de Aviación Civil (ANAC) por la zona del Delta. 

Antes del trágico vuelo, el avión realizó un viaje a Mendoza.