La tecnología suele depararnos noticias relativas a proyectos novedosos, desarrollos innovadores, dispositivos cada vez más inteligentes.

Sin embargo, la tecnología también tiene una contracara: un lado oscuro que, entre otras cuestiones, ha dado lugar a la aparición de nuevos delitos, como la "pornovenganza", el "grooming" o el "ciberacoso".

Una investigación divulgada reveló que uno de cada cinco australianos fue víctima de una "venganza porno", una problemática global que consiste en la difusión en la web de imágenes sexuales de carácter privado sin el consentimiento de alguno de los fotografiados, y donde la Argentina no es la excepción.

La senadora por San Juan Marina Riofrío (FpV), quien presentó un proyecto de ley que cuenta con media sanción en el Senado. La iniciativa busca criminalizar esta práctica y propone establecer la misma pena que para los delitos de grooming o ciberacoso.

"Me parece que quedó evidenciado el vacío legal en nuestro derecho penal a partir de la cantidad de casos que se empezaron a difundir en los medios", manifestó Riofrío, presidenta de la Comisión Banca de la Mujer del Senado.

"Si bien el tema quedó expuesto por los famosos, es una problemática que atraviesa todos los niveles. Y especialmente preocupa el impacto que puede tener en adolescentes", agregó la senadora, quien señaló que "se trata de un delito que en el 99% de los casos afecta a mujeres".

Proyecto

El texto del proyecto dice puntualmente: "Será reprimido con la pena de prisión de seis meses a cuatro años el que hallándose en posesión de imágenes de desnudez total o parcial y/o videos de contenido sexual o erótico de una o más personas, las hiciere pública o difundiere por medio de comunicaciones electrónicas, telecomunicaciones, o cualquier otro medio o tecnología de transmisión de datos, sin el expreso consentimiento de la o de las mismas para tal fin, aun habiendo existido acuerdo entre las partes involucradas para la obtención o suministro de esas imágenes o video".

En tanto, en los fundamentos se afirma que esas "conductas tienen un efecto devastador sobre las mismas al lesionar gravemente su intimidad y su privacidad". En ese sentido, Riofrío señaló que con esta iniciativa "se busca dar un mensaje muy claro de que es una conducta penada".

Australia

El trabajo de las universidades de Monash y de RMIT, realizado en base a más de 4.200 entrevistas, sostiene que un 20% de los australianos fue víctima de la "pornovenganza". El estudio mostró que el peligro mayor recae más en los jóvenes y los miembros de la comunidad LGBT (36%) que entre los heterosexuales (21%).

"Esto no se trata sólo de pornovenganza, las imágenes se están utilizando para controlar, abusar y humillar a la gente de una manera que va mucho más allá del escenario de una ruptura sentimental", afirmó la directora del estudio, Nicola Henry, de la Universidad RMIT.