Participaron más de 600 médicos que forman parte de la entidad. El relevamiento tuvo como objetivo identificar la magnitud de la problemática, conocer las situaciones de violencia y el grado de ellas, el perfil de los médicos que las sufren y entender las expectactivas de los médicos, en materia de prevención.

El 57,8% de los encuestados afirmó haber sufrido algún tipo de violencia en el ámbito laboral, es decir que casi 6 de cada 10 médicos han experimentado uno o más hechos de violencia contra su persona. De ese total, el 65% fue víctima en el ámbito público, es decir, en los hospitales y centros médicos de la provincia de Buenos Aires.

En tanto, el 89% de los que contestaron afirmativamente fue víctima de violencia verbal, y el 69,5% la sufrió por parte de los pacientes (la mayoría, pacientes de "primera vez"). La mayor parte de las agresiones se da durante la mañana y la tarde.

Las causas de las agresiones también comprenden esta investigación. El 32% respondió de manera violenta ante la demora o el tiempo de espera en la atención al paciente o bien por parte de sus familiares. Un 18,2% reaccionó producto de su estado mental al momento de la agresión alcoholizado, drogado o bien alguna patología mental preexistente. Cabe destacar que el 16,9% responde de manera violenta ante un estudio o resultado inesperado por el paciente.

El 61% de los médicos agredidos ha denunciado o reportado la agresión, lo que refleja la necesidad de éstos de llamar la atención ante una problemática que crece y que parece no tener control. Pero sólo el 11% de ese universo continuó alguna acción judicial contra el victimario.